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Los sistemas avanzados de ayuda a la conducción, también conocidos como los sistemas ADAS, tienen el propósito de mejorar la seguridad de los vehículos. Su aplicación es muy variada y de gran utilidad: contribuyen a facilitar el aparcamiento, eliminan puntos ciegos y detectan la salida del carril, entre otras aplicaciones. Ante un peligro, reaccionan en cuestión de décimas de segundos para alertar al conductor.
Por lo tanto, su principal cometido es el de evitar accidentes de tráfico o, al menos, minimizar sus consecuencias. Para ello, combinan el uso de radares, cámaras, láser e inteligencia artificial para que el conductor cuente con todo el apoyo necesario para permanecer informado de todo lo que le rodea. Además, es posible implementarlos en prácticamente todos los vehículos, desde un coche a un camión.
Dada su proliferación, la Comisión Europea se replantea cuáles deben incluirse obligatoriamente, un proceso que ha desarrollado a lo largo del tiempo. De hecho, en 2012 comenzaron a aparecer los primeros ADAS opcionales en vehículos de alta gama. Dos años después se hizo obligatoria la instalación de varios de ellos, como el aviso de cinturón desabrochado.
Según se han generalizado estos sistemas y bajado su precio, la normativa se ha ido adaptando. Por ejemplo, en 2018 se hizo obligatorio que los vehículos homologados llevarán un sistema de llamada automático en caso de accidente para avisar a los servicios de emergencia.
Los nuevos vehículos deben contar obligatoriamente con diferentes ADAS. Como has visto, la normativa se revisa cada pocos años para incluir algunas novedades. De este modo, los últimos avances se van introduciendo de manera gradual. En este caso, se plantea la implementación de varios sistemas, los cuales tendrán que estar presentes a partir de julio de 2022.
Para facilitar el proceso de implantación, la Comisión Europea ha diseñado tres fases, las cuales se irán desarrollando desde el año 2022 hasta el 2029. En cualquier caso, al final de este periodo, el parque móvil del continente será mucho más seguro. A continuación, te mostramos el contenido de cada fase, donde se diferencian dos grandes grupos: los vehículos de nueva homologación y, por otro lado, los vehículos nuevos y las piezas.
Los vehículos de nueva homologación deberán incluir a partir de 2022 diferentes sistemas. En el caso de los nuevos y las piezas, comenzará en julio de 2026. Para empezar, los coches y furgonetas contarán con varios ADAS específicos como el sistema de mantenimiento de carril, el frenado autónomo con detección de vehículos en movimiento y objetos y un registrador de eventos. Por otro lado, los camiones y autobuses dispondrán de advertencias de colisión y sistemas de información de punto ciego.
Más allá de los ADAS específicos, todos los vehículos mencionados incorporarán sistemas de control de somnolencia y advertencia de distracción o interfaz para instalar un alcolock. También se engloba la señal de frenada de emergencia y el detector de obstáculos en marcha atrás.
La segunda fase empezará a aplicarse a partir de julio de 2024 para vehículos de nueva homologación. Para los nuevos y las piezas, al igual que en la fase 1, será obligatorio desde julio de 2026. Los coches y furgonetas dispondrán de un detector de impacto frontal y frenado autónomo con detección de peatones y ciclistas. Junto con ellos, los vehículos autónomos requerirán de registrador de eventos y monitorización de la disponibilidad del conductor.
También se platea que los camiones autónomos lleven de serie platooning. Además de estos, será obligatorio instalar otros ADAS en todos los vehículos. Este es el caso del aviso avanzado, de distracción del conductor, ciberseguridad y reconocimiento de desgaste de neumático.
La última fase comienza para vehículos de nueva homologación a partir de enero de 2026, y el de los nuevos y las piezas, entra en vigor en enero de 2029. Llegados a este punto, la cantidad de sistemas a instalar se reduce considerablemente. En camiones y autobuses se llevarán registradores de eventos y requisitos de visión directa. Por su parte, las nuevas homologaciones incluirán protecciones para peatones para series pequeñas en 2028 y los nuevos vehículos en 2034.
La Comisión Europea busca garantizar la máxima seguridad en carretera. Si bien esta revisión de la normativa tardará en aplicarse varios años, sus resultados se dejarán notar. Gracias a los sistemas ADAS, los conductores de tus flotas estarán puntualmente informados de todo lo que ocurre en carretera: presencia de peatones, salidas de carril, detector de impactos, etc.
Asimismo, estas nuevas tecnologías se instalarán en todos los vehículos disponibles en el mercado, sin importar que sea un camión o un coche eléctrico. De esta forma, se evita que unos dispongan de los últimos avances y otros no. Si se diera esta situación, habría una disparidad que podría ser peligrosa en la carretera. Así, los conductores estarán en disposición de tomar decisiones cruciales en un instante.
Por último, pero no por ello menos importante, estos sistemas se mantienen activos para cumplir con su cometido durante toda la conducción, ya que permanecen atentos a los problemas que puedan surgir y reaccionan en cuestión de décimas de segundo.
En definitiva, esto es lo que tienes que conocer de la última revisión de la normativa ADAS. A través de sus fases, todos los vehículos dispondrán de sistemas de seguridad con la tecnología más avanzada y contrastada para las carreteras.
Esperamos que esta información sobre los sistemas ADAS hayan servido, visítanos Facebook.
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